La intoxicación por monóxido de carbono sucede cuando se acumula monóxido de carbono en el torrente sanguíneo.

Cuando hay demasiado monóxido de carbono en el aire, el cuerpo reemplaza el oxígeno en los glóbulos rojos con monóxido de carbono. Esto puede generar un daño grave en el tejido, o incluso la muerte.
El monóxido de carbono es un gas incoloro, inodoro, insípido producido mediante la combustión de gasolina, madera, propano, carbón y otros combustibles. Los aparatos eléctricos y los motores que no se ventilan de forma adecuada, en particular en espacios cerrados o sellados herméticamente, pueden generar que el monóxido de carbono se acumule hasta alcanzar niveles peligrosos.
Si crees que tú o alguna persona con la que estés tiene una intoxicación por monóxido de carbono, busca aire fresco y solicita atención médica de emergencia.

Síntomas
Intoxicación con monóxido de carbono
Entre los signos y síntomas de la intoxicación por monóxido de carbono se pueden incluir los siguientes:
Dolor de cabeza sordo – Debilidad – Mareos – Náuseas o vómitos – Falta de aire – Desorientación – Visión borrosa – Pérdida del conocimiento
La intoxicación por monóxido de carbono puede ser particularmente peligrosa para las personas que estén durmiendo o estén ebrias. Las personas pueden sufrir un daño cerebral irreversible o, incluso, morir antes de que alguien note que hay un problema.
Causas

La intoxicación por monóxido de carbono se produce debido a la inhalación de vapores producidos por la combustión. Cuando hay una cantidad excesiva de monóxido de carbono en el aire que respiras, el cuerpo reemplaza el oxígeno en los glóbulos rojos por monóxido de carbono. Esto evita que el oxígeno llegue a los tejidos y órganos.
Varios motores y artefactos que queman combustible producen monóxido de carbono. La cantidad de monóxido de carbono producido por estas fuentes generalmente no es motivo de preocupación. Pero si se utilizan en un espacio cerrado o parcialmente cerrado, como cocinar con una parrilla a carbón en el interior del hogar, por ejemplo, el monóxido de carbono se puede acumular y alcanzar niveles peligrosos.
Inhalar humo durante un incendio también puede causar intoxicación por monóxido de carbono.

Factores de riesgo

La exposición al monóxido de carbono puede ser particularmente peligrosa para las siguientes personas:
Bebés no nacidos – Niños – Adultos mayores – Personas con enfermedad cardíaca crónica
Aquellas personas que pierden la consciencia por una intoxicación con monóxido de carbono. La pérdida de la consciencia indica una exposición más grave.

Complicaciones

Según el grado y el tiempo de exposición, la intoxicación con monóxido de carbono puede provocar lo siguiente:
Daños cerebrales permanentes – Daño al corazón, que puede provocar complicaciones cardíacas que ponen en riesgo la vida – Muerte fetal o aborto espontáneo – Muerte

Prevención
Intoxicación con monóxido de carbono
Existen precauciones simples con las cuales se puede prevenir la intoxicación por monóxido de carbono:
Instala detectores de monóxido de carbono – Abre la puerta del garaje antes de encender el auto – Usa los dispositivos a gas según sus recomendaciones
Asegúrate de que los electrodomésticos y motores que usan combustible tengan la ventilación necesaria. Algunos de ellos son los siguientes:
Calefacción – Calderas – Parrillas de carbón – Distintos tipos de elementos de cocción – Calentadores de agua – Chimeneas – Generadores portátiles – Cocinas a leña – Motores de autos y camiones
Pide a la compañía de servicios que realice verificaciones anuales de todos los aparatos a gas, incluso la caldera.
Si tienes chimenea, mantenla en buen estado. Limpia la chimenea y su conducto cada año.
Cuando hagas remodelaciones, asegúrate de no bloquear las chimeneas y las rejillas de ventilación. Asegúrate de que no quedaron cubiertas por toldos o escombros.
Haz las reparaciones necesarias antes de regresar al lugar donde se produjo un incidente. Si ha ocurrido un caso de intoxicación por monóxido de carbono en tu hogar, es de suma importancia encontrar y reparar la fuente de monóxido de carbono antes de regresar. El departamento de bomberos o la compañía de electricidad locales pueden ayudarte.
Ten cuidado cuando trabajes con solventes en un área cerrada. El cloruro de metileno, un solvente hallado con frecuencia en removedores de pintura y barniz, se puede descomponer (metabolizar) y generar monóxido de carbono cuando se inhala. La exposición al cloruro de metileno puede ocasionar envenenamiento por monóxido de carbono.
Cuando trabajes con solventes, hazlo en exteriores o en áreas con buena ventilación. Lee las instrucciones con atención y sigue las recomendaciones de seguridad de la etiqueta.
Diagnóstico
Intoxicación con monóxido de carbono
Si entras a la sala de emergencias donde se sospecha que tienes intoxicación por monóxido de carbono, es posible que empieces el tratamiento de inmediato. Para confirmar el diagnóstico, es posible que el médico analice una muestra de sangre para verificar la presencia de monóxido de carbono.
Tratamiento

Si tú o alguien de tu entorno tiene signos o síntomas de intoxicación con monóxido de carbono, busca aire fresco de inmediato y llama al 911 o a un servicio de urgencia médica. Los signos y síntomas comprenden dolor de cabeza, mareos, falta de aire, debilidad y confusión.
Una vez que estés en el hospital, el tratamiento puede consistir en lo siguiente:
Respirar oxígeno puro – Pasar un tiempo en una cámara de oxígeno presurizado – La oxigenoterapia hiperbárica se puede usar en casos de intoxicación grave con monóxido de carbono

Consultar con un médico

Si tú o alguien de tu entorno tienen signos o síntomas de intoxicación con monóxido de carbono (dolor de cabeza, mareos, náuseas, falta de aire, debilidad, confusión), busca aire fresco de inmediato y llama al 911 o a un servicio de urgencia médica.