Los patovicas serán indagados este martes y están acusados de “lesiones leves calificadas por el concurso premeditado de dos o más personas”
El Juzgado de Garantías N°1 pidió la detención de los tres patovicas involucrados en la brutal golpiza en Necochea luego de confirmar sus identidades a través de las imágenes de las cámaras de seguridad. Se trata de César Jorge Martínez, Alan Nahuel Pirrota y Gonzalo José Roldán, acusados de “lesiones leves calificadas por el concurso premeditado de 2 o más personas”.
Según confirmó TN Central (TN), los tres exempleados del local bailable serán indagados este martes y podrían quedar detenidos hasta el viernes. Los videos registrados por las cámaras de seguridad de Tom Jones Bar fueron clave para reconstruir con mayor detalle lo que ocurrió en la madrugada del domingo. Los patovicas también habían sido denunciados por violencia homofóbica.
El boliche fue clausurado temporalmente por la Municipalidad, que apunta a esclarecer el hecho. Además, los tres patovicas fueron despedidos del local, cuyas autoridades lanzaron un comunicado en el que expresaron sus disculpas por el lamentable suceso. El boliche de Necochea también fue protagonista de un grave hecho de violencia en el que un grupo de patovicas atacó brutalmente a un padre y su hijo.
El mismo bar de la localidad costera había tenido episodio igual de grave en el año 2018, que terminó con una denuncia en el INADI. Se trata de Tom Jones Bar, un local bailable en el que hace cinco años un joven denunció haber sido echado del lugar por su orientación sexual. En aquella oportunidad, el bar rechazó las denuncias, las calificó de falsas y dijo que tenían el “fin de afectar la honorabilidad y la buena fe de la compañía”.
Marcelo Mangini, quien por entonces tenía 33 años, había viajado con amigos a Necochea por un fin de semana largo. Una de esas noches, decidieron salir a bailar al boliche Tom Jones Bar y durante la noche el joven se besó con otro hombre. Fue en ese momento en que comenzaron las intimidaciones. El dueño del establecimiento les advirtió a los dos hombres que dejaran de besarse porque “había familias”. Los jóvenes se fueron, volvieron y nuevamente se besaron.