El preso, alojado en una comisaría de Pigüé, se le pidió a su abogado, que también patrocina al otro reo. “No lo aguanto más”, admitió
Un preso alojado en un calabozo de un la comisaría de Pigüé, en la provincia de Buenos Aires, protagonizó un insólito incidente ya que le pidió a su abogado que libere a su compañero de celda, a quien también representa, porque “habla mucho”.
Aunque parezca mentira, el detenido pidió formalmente la excarcelación de su compañero ya que no lo tolera más.
El planteo, que fue rechazo por motivos jurídicos, fue realizado vía telefónica al abogado defensor, que casualmente es el mismo que asiste al otro individuo, aunque por hechos totalmente distintos: uno (el que pide quedar solo) está encerrado por desobediencia desde hace 10 días, mientras que el otro se encuentra allí por los delitos de resistencia a la autoridad y lesiones leves, luego de haber protagonizado una pelea con otro vecino por una deuda, tres semanas atrás.
En la comunicación telefónica, el reo le dijo al letrado: “No lo aguanto más”. Ante eso, el abogado admitió que nunca le había pasado algo similar. “Nunca me pasó que alguien me pida por la excarcelación de un compañero de celda y no por la de él mismo”, relató.
Pese al suplicio del preso, deberá seguir tolerando a su compañero ya que “no está entre los supuestos de los artículos 169 y 170 del Código Procesal Penal la posibilidad de pedir la excarcelación porque el compañero de celda es ‘pesado’”, explicó.
