Máximo Thomsen pidió declarar luego de que lo hiciera su madre. Habló de que estaban borrachos durante el crimen y que respondió a las patadas porque le estaban pegando a él

Máximo Thomsen, uno de los ocho imputados por el asesinato de Fernando Báez Sosa el 18 de enero en Villa Gesell, pidió declarar esta lunes en el juicio, luego de escuchar a su madre ante el tribunal

Agregó que “empezamos desde temprano tomando alcohol en la playa con dos heladeritas llenas, y medio mamados fuimos a comprar entradas para el boliche Le Brique. Fuimos a la previa, llevamos más alcohol y tipo 4 de la mañana fuimos” a la discoteca. 

El deportista de 23 años, quien le aplicó las patadas mortales a Fernando en la puerta del boliche, dijo: “Quiero pedir disculpas por lo sucedido, jamás hubiese querido matar a alguien. Me lastima haber estado en ese lugar. Es algo que nunca en la vida hubiese buscado. Quería hoy dar la realidad de lo que pasó esa noche”. 

Habló Thomsen, el joven que le pegó las patadas mortales a Fernando Báez Sosa
Máximo Thomsen durante el juicio

“Había tanto movimiento adentro que se caía el vaso. Digo ‘basta de empujar’ y me responden que estamos todos en la misma. siento que me pegan, vienen los de seguridad y discuto con él porque no hizo nada”. 

En otro momento dijo que “nunca escuché tantas cosas sobre mí como en estos años, hablaron con mucho odio hacia mi persona. Jamás en la vida tendría esa intención (la de matar)”. 

Habló Thomsen, el joven que le pegó las patadas mortales a Fernando Báez Sosa
La zapatilla de Thomsen con la sangre de Fernando

Sobre el asesinato de Fernando, relató que “cuando me saca el de seguridad escucho que dice ‘llevalo a la cocina y cagalos a palos’. Cuando me sacan no podía respirar. Veo que los chicos cruzan la calle y mi amigo se mete en una ronda de desconocidos. Me pegan una patada, una piña y yo reacciono pegando una, dos o tres patadas. Jamás pensé en matar a nadie. Dicen que soy el líder, que maté a alguien pero nunca busqué algo así. Me metí porque vi que eran uno contra muchos”. 

Cuando le preguntaron si había advertido que Fernando estaba sin reacción en el piso, Thomsen, quien reconoció como suya la zapatilla secuestrada con sangre de Báez Sosa, dijo: “En ese momento no miré, no presté atención, miré para arriba”. En tanto, cuando quiso interrogarlo Fernando Burlando, abogado de la familia de la víctima, el exdeportista sentenció: “no me siento cómodo respondiéndole preguntas a una persona que me insulta a mi, a mi mamá. No me siento cómodo respondiéndole”.

Habló Thomsen, el joven que le pegó las patadas mortales a Fernando Báez Sosa

Después Thomsen dijo que se enteró después, por sus amigos, que Fernando había muerto por los golpes y él respondió: “No puede ser, si solo duró unos segundos. Yo siempre voy a comer, por eso fuimos a McDonald”.

Ya en la comisaría, cuando le confirmaron que Fernando había muerto, dijo que vomitó por lo que le causó la noticia.

DECLARÓ LA MADRE DE THOMSEN

Thomsen pidió hablar luego de escuchar a su madre, quien dijo que padece cáncer: “Me despierto y quiero que esto sea una pesadilla” dijo la mujer, en llanto. Añadió que desde que su hijo está preso no hace otra cosa que ir a verlo e ir al médico.