Los trabajadores nucleados en la UTA pararon el servicio por un conflicto entre un delegado de ese gremio y un representante de la empresa concesionaria.

Trabajadores nucleados en la Unión Tranviarios Automotor (UTA) interrumpieron este martes de manera sorpresiva el servicio de la línea B de subterráneos -con recorrido desde la estación Leandro N. Alem hasta Juan Manuel de Rosas- por una protesta gremial originada en un conflicto entre un supervisor de la empresa concesionaria y un delegado.

Se trata de un conflicto que “surge de una discusión entre un supervisor y un delegado gremial del taller Rancagua que incluyó agresiones mutuas, derivando en un conflicto que se agravó con intervención de los respectivos sindicatos y que aún no ha podido ser resuelta”, indicaron desde la empresa Emova, la empresa concesionaria del servicio, a través de un comunicado.

La empresa informó además que se realizan “gestiones ante las autoridades laborales con la finalidad de normalizar el servicio lo antes posible”.

En tanto, desde la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP), los Metrodelegados, indicaron que se mantienen al margen de este conflicto y que la medida de fuerza dificulta la elección de autoridades de la entidad sindical que estaba prevista para hoy.

La UTA lanzó una sorpresiva medida de fuerza en la Línea B de subtes

Comunicado oficial

Sobre la sorpresiva interrupción del servicio en la Línea B, Emova informó: “Esta medida de fuerza surge de una discusión mantenida (a finales de septiembre) entre un supervisor y un delegado gremial del taller Rancagua que incluyó agresiones mutuas, derivando en un conflicto que se agravó con la intervención de los respectivos sindicatos y que aún no ha podido ser resuelta, pese a las gestiones realizadas por la empresa y a la intervención de las autoridades laborales. Estas gestiones continúan con la finalidad de normalizar el servicio lo antes posible”, cerró el documento dado a conocer por la concesionaria del servicio.