Dicha medida a su vez afectará a la confianza que la industria tiene en la cadena de suministro estadounidense

TSMC dejará de fabricar procesadores para Huawei tras las últimas medidas anunciadas por Estados Unidos. Esta decisión de TSMC llega después de que el gobierno de Trump endureciese los controles de exportación de equipamiento y software estadounidense, de tal forma que cualquier fabricante de chips extranjero que use herramientas, propiedad intelectual o equipos de diseño estadounidense tendrá que pedir una licencia al Departamento de Comercio de Estados Unidos antes de enviar productos a Huawei.

Aquellos procesadores que estén en producción y aquellos pedidos aceptados antes del 15 de mayo no se verán impactados. Estos se podrán seguir fabricando siempre y cuando se puedan enviar antes del 14 de septiembre. De todos modos, es un un duro golpe para Huawei y TSMC. Esta última empresa ha dicho que “no revelan los detalles de los pedidos de los clientes” y que “TSMC siempre ha cumplido con las leyes y regulaciones aplicables”. En un comunicado oficial, Huawei ha calificado la decisión del gobierno estadounidense de “arbitraria y perniciosa” y asegura que “afectará a la expansión, el mantenimiento y las operaciones continuas de redes por valor de cientos de miles de millones de dólares que hemos implementado en más de 170 países”.

TSMC le suelta la mano a Huawei

Reuters deslizaba que Huawei estaba barajando la posibilidad de mover gradualmente su producción de chips a China, dejando así TSMC para optar por Semiconductor Manufacturing International Corp (SMIC), con sede en Shangai. De por sí, SMIC ya ha comenzado a producir en masa los Kirin 710A.