En la segunda audiencia del juicio contra la narcobanda rosarina, los investigadores dieron a conocer la violenta llamada contra el juez Ismael Manfrín, uno de los magistrados que condenó a la organización criminal.
El juicio contra siete miembros de la narcobanda rosarina de Los Monos por una serie de atentados en Rosario se reanudó hoy con un audio revelador: la amenaza telefónica de uno de los acusados a uno de los jueces que condenó a la organización criminal.
“Somos acá la banda de los Cantero. A Los Monos suéltenlos porque lo vamos a agarrar al juez, le vamos a reventar toda la casa y lo matamos, lo vamos a secuestrar. Lo vamos a secuestrar a todo”, se escucha en el mensaje que se difundió en la segunda jornada del debate.
La llamada contra el juez Ismael Manfrín, uno de los magistrados que había condenado a integrantes de Los Monos, fue realizada al 911 el 29 de mayo de 2018.
Manfrín había sido intimidado días antes por Los Monos cuando atacaron a tiros dos de sus propiedades, una ubicado en la calle Italia al 2100 y otra en Montevideo al 1000, con aproximadamente veinte minutos de diferencia.
Ariel “Guille” Cantero (33), cabecilla de la organización, es uno de los siete acusados. Los investigadores del caso sospechan que planificó desde la cárcel los distintos ataques contra edificios judiciales y casas de jueces vinculados a la investigación contra Los Monos, registrados entre mayo y agosto de 2018.
También creen que sería responsable del último ataque contra el Centro de Justicia Penal (CJP), registrado el miércoles pasado, pocas horas antes del inicio de este juicio.
Cantero está detenido en la cárcel federal de Marcos Paz, donde cumple una condena a 64 años de prisión por distintos delitos. El primer día del juicio lo siguió vía Zoom. Y en su primera intervención amenazó a la jueza Hebe Hebe Marcogliese. “Me dedico a contratar sicario para tirarle tiros a los jueces”, respondió el capo narco a una pregunta formal sobre su oficio.
Un teléfono de línea en la celda
Hoy, en la reanudación del juicio, prefirió quedarse con su mujer, que lo visitó en el Complejo Penitenciario Federal. A la mañana, en una requisa ordenada por los fiscales de la Unidad flagrancia de Rosario, Franco Carbone y Federico Rébola, hallaron en su celda un teléfono de línea prepago con el que sospechan habría dado las directivas para el atentado del miércoles pasado.
“En las requisas es habitual que se encuentren teléfonos celulares o chips de celulares, pero nunca teléfonos de línea”, reconoció un investigador. El aparato será analizado para conocer el detalles de las últimas llamadas entrantes y salientes de esa línea, en particular las realizadas antes y después del ataque contra el Centro de Justicia Penal.
El juicio contra Cantero y otros seis miembros de la organización se inició el viernes pasado con un fuerte operativo de seguridad para el que se desplegaron 70 móviles y 250 efectivos, varios de ellos de las Tropas de Operaciones Federales (TOE) apostados en los techos del edificio del CJP, que la noche del pasado miércoles fue atacado a balazos.
El debate está a cargo de los jueces Hebe Marcogliese, Rafael Coria y Pablo Pinto y se estima que se extenderá durante varias jornadas.