El caso ocurrió en la ciudad de La Plata y fue grabado por una cámara de seguridad vecinal. La víctima, que circulaba en la misma dirección que el móvil policial, terminó con una costilla fisurada.

Un joven motociclista de 24 años terminó con una costilla fisurada después de haber sido atropellado intencionalmente por un patrullero en la ciudad de La Plata. Los dos policías que viajaban en el móvil fueron desafectados de la fuerza después de que se conoció el video.

La grabación dura 49 segundos y muestra cómo el móvil del Destacamento Modular El Mercadito arrolla a un joven que circulaba en moto por la calle 120, en la misma dirección que los policías.

El chico, de 24 años y llamado Valentín, rueda por el asfalto mientras el patrullero pasa por encima de su moto. Dos policías bajan, lo ayudan a levantarse y le piden que apoye sus manos contra el capot de la camioneta policial. Le sacan la mochila, la patean y se la revisan.

Valentín no llevaba armas ni había cometido un delito que justificara ese accionar. De hecho, no tiene antecedentes. “Le dijeron que tenía que subir a la camioneta porque lo iban a llevar a la comisaría. Mi hijo se negó e inmediatamente llamó a un abogado amigo que le indicó los pasos a seguir. Qué hubiera pasado si no sabía defenderse. Estoy muy preocupada por el accionar de la policía, a mi hijo no le pasó nada, pero veo las noticias y estoy al tanto del asesinato de Lucas (González) y de otro hombre en una comisaría de San Clemente del Tuyú”, contó Lorena Tizio, mamá de la víctima, en declaraciones al canal TN.

El joven permaneció en el lugar junto a unos vecinos y luego fue por sus propios medios hasta un hospital, donde lo revisaron y constataron que tenía una costilla fisura como consecuencia del impacto.

“Nunca llamaron a una ambulancia”

“Le apuntaron con un arma. Y a pesar de los golpes que sufrió nunca llamaron a una ambulancia. Había dos vecinos en la vereda que vieron toda la secuencia y le pasaron el video, por eso los policías se fueron rápido”, amplió la mujer.

Según la versión policial, los uniformados tocaron un silbato para que el chico detuviera la marcha de su moto, pero él no lo hizo y entonces decidieron frenarlo a su manera.

A partir de la difusión del video y la denuncia del joven, se inició una causa penal que recayó en la fiscalía penal en turno, a cargo de Cecilia Corfield. Además, la Auditoría de Asuntos Internos abrió una investigación y detectó que los policías implicados nunca habían reportado el episodio a sus superiores.

“De la compulsa se constata que los efectivos no han confeccionado actuaciones algunas, ni han comunicado los hechos acontecidos a sus mandos superiores. Se entabla comunicación con el auditor sumarial, quien dispone por orden del auditor general la inmediata desafectación de los efectivos policiales”, indicaron fuentes del caso.

Los dos policías que fueron separados de sus cargos son los oficiales Daniel Alejandro Almada y Gonzalo Martín Ríos, ambos integrantes de la División Proximidad Vecinal de la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI).