Ya son tres los detenidos por el crimen del ex rugbier de los Pumas, entre los que se encuentran dos integrantes de la ultraderecha francesa.
Se trata de Romain Bouvier, de 30 años, quien fue hallado en el departamento francés de Sarthe, al oeste del país galo.
Inicialmente Bouvier, que fue descripto como un individuo “casi calvo, con barba negra y corpulento”, había sido visto en la comuna de Solesmes, en Sarthe, pagando la habitación de un hotel.
Las fuerzas de seguridad se dirigieron al lugar para arrestarlo pero no lo encontraron allí. Finalmente, cayó cuando lo hallaron sentado en el banco de una plaza luego de extraer dinero de un cajero.
La joven fue imputada por “complicidad de asesinato” y quedó detenida de manera preventiva en su hogar con custodia policial.
En su declaración, manifestó que le dijo a “los muchachos que se fueran” y lamentaba lo que le había ocurrido al ex integrante de la Selección Argentina de Rugby. “Actué por amor y por instinto. Les dije que no pelearan; estoy tan enojada y triste”.
Más tarde, Loïk Le Priol, principal sospechoso, fue arrestado cerca de la frontera de Hungría con Ucrania.
Allí, le contó a los efectivos que “iba a pelear a la guerra” contra la invasión rusa a ese país. El ex militar es un conocido ultraderechista y nacionalista francés, antiguo miembro del llamado Grupo Unión Defensa (GUD) -disuelto en 2017- que ya tiene antecedentes por “violencia agravada”.
Bouvier, el tercer sospechoso detenido el jueves, también pertenece a la extrema derecha y junto con Le Priol debían presentarse ante la justicia francesa en junio por la causa en la que están procesados por un hecho ocurrido en 2015, contra un ex presidente del grupo ultraderechista.