La víctima tiene 15 años y, según denuncian sus familiares, fue citada por el hombre a la sede a firmar unos papeles. Al imputado le negaron la excarcelación 

Acusado por un presunto abuso sexual contra una jugadora del fútbol femenino de las divisiones inferiores del Club Español, el exentrenador de la institución fue detenido en las últimas horas y si bien promovió un pedido de excarcelación, el mismo fue denegado, informaron hoy fuentes judiciales.

De acuerdo a la madre de la víctima, de 15 años, Carlos Torres citó a la adolescente el jueves pasado con la excusa de firmar “unos papeles” en la sede del club, ubicada en Villa Soldati. Allí, siempre según la denuncia, él cerró la puerta con llave y la violó. “No había ningún papel para firmar”, destacó la progenitora.

También aseveró que el hombre “venía molestando a mi hija desde hacía tiempo y cuando la cruzaba por la calle en su auto, bajaba la velocidad, le gritaba ‘te amo’ y le tiraba besos. Ella tiene sólo 15 años. Tal fue el acoso que quiso dejar de ir al club e incluso dejó de ir a entrenar para no verlo”.

Detuvieron a un entrenador del Club Español por una presunta violación a una jugadora de las inferiores
Carlos Torres se encuentra detenido

El área de género de Español fue la que activó el protocolo al conocer la situación que había atravesado la jugadora, cuya identidad fue resguardada, y el viernes apartó al entrenador del cargo hasta tanto la justicia determine su responsabilidad. 

“Se pone a disposición de la denunciante a fin de tomar todas las medidas pertinentes para preservar la salud integral del plantel femenino y de toda la institución”, publicó el club en sus redes sociales.

Mientras tanto, la investigación recayó en la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 55, a cargo del fiscal César Troncoso, quien determinó que se detuviera a Torres luego de ordenar distintas pericias médico-legales para recabar rastros de abuso y otras medidas de prueba.

A su vez, la abuela de la chica dijo que su nieta “se encuentra dolorida, no puede dormir, no puede comer, está anímicamente muy mal” y agregó que “está contenida por toda la familia pero esta basura le arruinó la vida”.

Añadió que “cuando me enteré de lo que ocurrió mi primera reacción fue agarrar una cuchilla y querer salir corriendo para el club, pero mis nietas no me dejaron. A mí no me importaba ir presa. El abuso se realizó a menos de 50 metros de mi casa. Yo lo que quiero es justicia, hay muchas irregularidades dentro del club”.