El exsenador Horacio Rafael Román fue brutalmente atacado junto a su mujer, a quienes retuvieron por más de dos horas y les quitaron más de dos millones de pesos
Un millonario robo en su casa de Castelar fue el que sufrió en las últimas horas un exsenador provincial junto a su esposa, al haber sido sorprendidos mientras descansaban por tres delincuentes armados, mientras que un cuarto quedó en el exterior haciendo de campana.
El brutal ataque se perpetró durante la madrugada de ayer en un domicilio ubicado en la calle Larralde al 3200, de la citada localidad del partido de Morón, en el conurbano bonaerense. Hasta allí llegaron los cuatro ladrones y tres de ellos ganaron el interior de la propiedad, donde se encontraba Horacio Rafael Román (72) y su mujer Amalia Iglesias. A base de amenazas los despertaron para después maniatarlos y golpearlos, mientras les pedían el dinero que fueron a buscar. En declaraciones posteriores a la prensa, las víctimas relataron que los malvivientes a todo momento decían: “Ahora nos dan todo y nos llevamos a su marido”, a lo que la señora respondía: “No, me voy con él. Nos llevan a los dos”.
Finalmente los malhechores recorrieron todos los ambientes del hogar y llegaron hasta una caja fuerte, donde encontraron $2.000.000 y 10 mil dólares. “Nos dejaron en la calle, prácticamente“, se lamentó el exsenador, en relación al dinero sustraído. Al botín también se le sumaron seis escopetas de caza y un vehículo.
Según los que pudieron determinar los pesquisas, fuera de la propiedad los esperaba un cuarto delincuente, que hacía de “campana“, junto a quien huyeron a bordo de la camioneta Honda CRV color gris de la esposa del exsenador.
La fiscal Paula Salevsky, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción 4 de Morón, dispuso las diligencias de rigor y caratuló al hecho como “robo doblemente calificado por el empleo de arma de fuego y por haber sido cometido en poblado y en banda”.
El exsenador aseguró que el episodio que vivieron fue “doloroso” y que temió ser asesinado. “No sabíamos si nos mataban, nunca pensé que pudiera suceder una cosa así. Querían plata, me pegaban“, recordó, y aseveró que los ladrones los tuvieron “secuestrados” entre las 3 y las 5.30.
Iglesias, en tanto, también expresó su dolor por lo que les sucedió y dijo que los hampones los dejaron maniatados con precintos antes de escapar y que, para poder liberarse, tuvo que descender dos escaleras “apoyando la cola y agarrándose con las manos. Lo único que quería era cortar el precinto con un cuchillo y poder liberar a su marido”.
La esposa del exsenador agregó que les robaron también relojes y que ella temía por la salud de su marido porque sufre del corazón, mientras que uno de los hijos del matrimonio especificó que los ladrones “sabían quién era” su padre. “Saltaron la pared, forzaron la ventana de una pieza y subieron a la habitación de mi papá. Los ataron con precintos. Rompieron toda la casa”.
La pareja aseguró que no tiene sospechas de quiénes podrían ser los asaltantes y diferenció este hecho de uno que vivieron hace dos años, de similares características, aunque planificado. En ese sentido, el exsenador calificó el robo como “un hecho más de inseguridad” con la diferencia de “que sabían a quién venían a robar”.
Ahora los investigadores de la causa analizan las cámaras de seguridad para intentar dar con los implicados, aunque todavía nada se sabe de ellos.